Fomento de la biodiversidad en espacios agrícolas. Jornada I - "Viviendo en el campo".

Los entornos agrícolas ocupan amplias extensiones de terreno en nuestro país. Su manejo tradicional ha preservado un equilibrio natural que ha hecho de estos espacios áreas con gran valor natural. Sin embargo, los cambios de usos de la agricultura moderna han roto ese equilibrio, amenazando la riqueza natural de estos medios. Los esfuerzos conservacionistas han tendido a centrarse en los espacios naturales protegidos dejando de lado los ecosistemas agrícolas. La fauna y flora asociadas a estos entornos antropizados son, sin embargo, las que están sufriendo más acusados declives en las últimas décadas.

Las zonas agrícolas de la comarca de la Sierra de Cádiz y las campiñas que se extienden a sus pies tradicionalmente han constituido un paisaje agrícola compuesto por un mosaico de cultivos variados capaz de albergar una enorme riqueza natural. Esta zona, al igual que el resto de la península, no se ha visto ajena a estos cambios y a las desastrosas consecuencias medioambientales que conllevan. Socialmente existe la percepción de que las zonas agrícolas son espacios con escasos valores medioambientales, independientes del entorno natural en los que se enmarcan. El enfoque de la agricultura convencional siempre ha buscado incrementar la producción de cosechas agrícolas sin considerar las consecuencias posteriores sobre el ambiente en el que se desarrolla. No obstante, nuevas corrientes de pensamiento surgidas como respuesta a la crisis ambiental y social que vivimos y fundamentadas en las bases de la agroecología y el desarrollo sostenible plantean un modelo agrícola, social y económico alternativo al practicado hoy en día. La biodiversidad es un valor en alza y despierta un interés creciente por parte de las instituciones y de una sociedad cada vez más informada y preocupada por su conservación.

El proyecto "Fomento de la biodiversidad en espacios agrícolas" coordinado por O-Live en colaboración con la Red Agroecológica de Cádiz y financiado por Diputación de Cádiz tiene como objetivos tratar la importancia de la biodiversidad en los terrenos cultivados y promover el intercambio de conocimientos mediante la realización de jornadas de voluntariado en fincas que desarrollan proyectos agrícolas innovadores y respetuosos con el medio natural.