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Fomento de la biodiversidad en espacios agrícolas: Jornada III - Olivar Torremelgarejo.

Para esta tercera jornada del proyecto, el grupo de voluntarios se trasladó a un pequeño oasis en los alrededores de Jerez. Rodeado por cultivos intensivos, el olivar de José Antonio se recupera poco a poco de años de un manejo convencional, que unido a las accidentadas características del relieve, habían causado graves problemas de pérdida de suelo. La búsqueda de una mejora en el equilibrio natural de su finca impulsó a este miembro de la Red Agroecológica de Cádiz a participar en este proyecto.

El grupo de voluntarios que acudió a Torremelgarejo llevó a cabo diversas tareas de mejoras de hábitat. Se construyeron cajas nidos para páridos para promover el control biológico de la mosca del olivo, plaga habitual en estos cultivos.

Para fomentar el desarrollo de la cubierta vegetal y de los setos que José Antonio ha plantado en los linderos de la finca, se construyeron y colocaron hoteles de insectos diseñados para ser ocupados por polinizadores solitarios y otra fauna auxiliar.


Una caja para mochuelo y otra para cernícalo o lechuza se colocaron en lugares elevados de la finca. Estas rapaces cada vez encuentran más dificultades para disponer de lugares adecuados para su nidificación por los cambios que está sufriendo en las últimas décadas el paisaje agrario. Sin embargo, estas pequeñas rapaces son fantásticas aliadas del agricultor al controlar eficazmente la presencia de roedores y grandes insectos.


No menos importantes son los murciélagos, también voraces insectívoros que controlan los números de mosquitos y polillas en sus cacerías nocturnas. Para estos mamíferos voladores, el equipo de voluntarios también colocó una caja nido.

Por último, el grupo excavó y construyó una charca. Los ecosistemas acuáticos, cada vez más escasos, son fundamentales para la fauna en general y vitales para grupos tan amenazados e importantes como los anfibios y las libélulas.

Tras una fantástica comida de convivencia el propietario nos explicó su método de trabajo en su parcela. A diferencia de las fincas circundantes en las que predomina el laboreo intensivo y la utilización de fitosanitarios y fertilizantes, José Antonio nos mostró cómo va trabajando para favorecer la restauración de las cubiertas vegetales en su finca. Laboreos superficiales cada cuatro años, la presencia de ganado equino con la utilización de su abono, siegas en función de la disponibilidad de agua y el mantenimiento y fomento de setos verdes perimetrales están ayudando a que el Olivar de Torremelgarejo mejore su productividad gracias a la recuperación de su equilibrio natural.


La jornada terminó con la cata de los vinos de producción propia que José Antonio elabora a partir de las viñas que tiene en su finca.

Por último nos queda agradecer a José Antonio su hospitalidad, a los voluntarios su trabajo y a la Red Agroecológica de Cádiz su apoyo en el desarrollo de esta iniciativa. "Fomento de la biodiversidad en espacios agrícolas" es un proyecto coordinado por la Asociación Medioambiental O-Live y financiado por la Diputación de Cádiz.

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